Participó en la ceremonia del Inti Raymi, en Sacsayhuaman, en la región Cusco.
El presidente Francisco Sagasti pidió hoy no fomentar divisiones que destruyen a la patria ni levantar las manos o los puños contra las hermanos y hermanos peruanos que piensan distinto.
“Nuestros verdaderos enemigos, a los cuales solo podremos vencer unidos, son la intolerancia, la discriminación, el racismo, corrupción y violencia en todas sus expresiones”, señaló.
Durante su participación en el Inti Raymi, en Sacsayhuaman, en la región Cusco, el mandatario sostuvo que la historia concede una nueva oportunidad a los peruanos en el Bicentenario.
“Solo reconciliándonos, unidos en confraternidad y diálogo abierto y sincero podemos hacer uso fructífero de nuestras diferencias, insignificantes al lado de nuestras potencialidades, dijo.
Según remarcó, iniciar la tarea de dejar de lado la discordia, el rencor y la sospecha pasa por identificar los prejuicios propios al juzgar las motivaciones de los otros, y esforzándose por aceptar que no siempre se tiene la razón y hay diferentes puntos de vista válidos.
“Desmontemos andamiajes obsoletos que envenenan las mentes y apuntalan las fachadas de las diferencias que impiden reconocer que el Perú es un hermoso proyecto en construcción”, afirmó.
Al concluir su discurso, el jefe del Estado hizo entrega simbólica del Escudo del Cusco, devuelto recientemente por el Museo Nacional del Indígena Americano de Estados Unidos. (Agencia Andina)