Parece que para la generación del bicentenario el deber está fragmentado. ¿Es posible tenerle miedo al Covid-19 cuando tienes que sentarte a contar los votos que marcarán el destino de tu país y no cuando te juntas con tus amigos para marchar en Miraflores, porque ni “locos” se van a la Plaza San Martín?
Según la ONPE, fueron los distritos de San Isidro, Miraflores, San Borja y Surco los que tuvieron la menor cantidad de mesas de sufragio instaladas en la capital.
Es muy difícil para un limeño de clase media alta comprender que un candidato como Pedro Castillo pase a segunda vuelta con el mayor puntaje, porque hasta el 11 de abril no comprendían que el Perú es más que Lima.
Los resultados que tenemos para la segunda vuelta electoral son la radiografía más cruda de nuestro país, una en la que se demuestra que la derecha y centro se pelean por saber quiénes son los mejores, mientras la izquierda avanza sigilosamente en el interior del Perú.
Es tu deber ir a marchar por todo lo que te parezca incorrecto, pero también es tu deber votar y promover lo correcto para todos tus compatriotas.
Si hoy eres de los que se encuentran criticando a la izquierda por redes sociales y promoviendo el levantamiento de la gente en las calles, te invito a asistir a las próximas elecciones presidenciales y ofrecerte como voluntario desde temprano para que no se pierdan votos por falta de mesas de sufragio y para que demuestres que no solo estás para la foto de Instagram, sino para la historia de un país.